Siempre pense en mi mismo como Darth Vader. Una figura oscura y misteriosa que camina casi sin que te des cuenta, respetado por todos aunque sea por una increíble habilidad con el sable láser y el poder de asfixiar a cualquiera con el uso de La Fuerza ("disculpa aceptada capitán Needa") pero con una misión: obtener el poder a toda costa aunque eso lleve implícito una espiral de odio y destrucción. Recordemos que se trata de ser un villano de películas, así que no hay caso en tratar de ser buena gente.
Sin embargo, resulta que hago el test con la mayor honestidad posible y soy más parecido a Jack Torrence, el papel que hace Jack Nicholson en El Resplandor (The Shinning) que al mítico Vader. Torrence no estuvo loco siempre, sino que fue perdiendo la cordura por pasar demasiado tiempo consigo mismo, algo que yo hago pero en lo que no creo excederme.
Pero mi sorpresa no viene de ser comparado con un maníatico sicópata, sino de la seriedad con la que respondí las preguntas del test, así que obtener un resultado tan sorpresivo fue un pequeño shock porque al final todos esos asesinatos y charlas con uno mismo terminan por aburrir.
¿No es algo extraño que la percepción que tenemos de nosotros mismo pocas veces coincide con lo que la imagen que proyectamos a los demás?
No comments:
Post a Comment